La placa dental
Cuando hablamos de la placa dental lo hacemos de una película bacteriana pegajosa y transparente que se pega a nuestros dientes. Se forma tras las comidas cuando los restos se mezclan con nuestra saliva.
Si no tenemos una higiene diaria y adecuada, dicha placa no se elimina y puede llegar a endurecerse, convirtiéndola en lo que llamamos cálculo dental conocido como sarro. Es una película más dura que conlleva gran número de bacterias y que no se elimina con el cepillado. Cuando esto ocurre debemos acudir al dentista ya que solo a través de una limpieza en clínica es posible eliminarla evitando complicaciones.
El nivel de pH en la saliva es muy importante para nuestra salud bucal, siendo el nivel ideal en torno al 7, protegiendo de las caries y el sarro. Por diversos motivos, hay personas con un nivel ácido por debajo del 7 lo que facilita el desarrollo de bacterias, mientras que por encima del 7 se facilita el sarro.
Consecuencias de la placa
El sarro dental y la placa son causas de caries y enfermedad periodontal. Las bacterias presentes en la placa bacteriana pueden producir infección en las encías, lo que provoca inflamación (gingivitis) y pueden destruir los tejidos de sujeción de los dientes (periodontitis).
Para prevenir el sarro y la placa debemos llevar una buena higiene bucal y acudir con regularidad a nuestro dentista. Para ello debemos limpiarnos los dientes 3 veces al día unos dos minutos con el cepillo y pasta adecuada.
También debemos usar hilo dental para eliminar placa donde el cepillo no llega. Así mismo usar colutorio bucal que ayude a prevenir la formación de placa y, por último, asistir una o dos veces al año al dentista para una limpieza profesional.
